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Arquitectos: Estudi E. Torres Pujol
- Área: 150 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Jose Hevia
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Se trata de la reforma de una vivienda donde las marcas del pasado conviven con el presente, con la flexibilidad suficiente en sus nuevos espacios como para responder ante posibles modificaciones en un futuro que siempre es incierto. El encargo consiste en transformar la consulta de un pediatra en una vivienda para una familia de dos adultos, dos niñas, un perro y un gato.
Las solicitudes básicas por parte de la propiedad fueron las siguientes; Dotar a la vivienda de una zona central de estar-comedor-cocina amplia y espaciosa, a poder ser en contacto con la gran terraza exterior; Disponer de un dormitorio principal con baño independiente y un dormitorio de las niñas cerca de este; Disponer de una habitación polivalente independiente que pueda funcionar como cuarto de juegos, despacho, sala de estudio o dormitorio extra para invitados.
Para conseguir ese amplio espacio central de la vivienda se decidió eliminar varios tabiques que compartimentaban en exceso el inmueble. Unas de las decisiones fundamentales del proyectista fue mantener las marcas de dichos tabiques en el techo, cuyo resultado final es una presencia muy potente de dichas marcas, que arañan el techo y evocan unas preexistencias de lo que fue aquel espacio en el pasado, dotándole de valor y protagonismo. Para no perder altura y en consecuencia minimizar el volumen del espacio central, se eliminó el innecesario falso techo y se decidió que las instalaciones y las luminarias (que se diseñaron especialmente para la casa) transcurrirían vistas por el techo, cruzándose con las huellas de los antiguos tabiques, creando un dibujo inesperado en el cielo interior.
Con la nueva distribución se consigue acceder a la terraza desde el espacio central y, sobre todo, permite la ventilación cruzada de la vivienda, proporcionando un agradable frescor en los meses calurosos de verano. Al abrir dicho espacio central a la fachada Sur también facilita el asoleamiento en los meses más fríos de invierno, que es cuando el sol discurre más bajo y se cuela en el interior de la vivienda. En la renovación, los nuevos cerramientos y baldosas se han ejecutado con materiales fabricados en la isla de Mallorca y se ha utilizado madera con certificado de gestión forestal sostenible. Los pilares estructurales de hormigón se han desnudado, eliminando el revoco y dejando a la vista la auténtica piel del material. Por otro lado, en las fachadas es donde la mejora energética se hace más latente, gracias a la dotación de un nuevo aislamiento térmico, utilizando para ello lana de oveja.
Al reajustar la distribución en general y la ubicación de las zonas húmedas en particular, se ha conseguido dotar a la vivienda de un dormitorio principal con baño independiente. El dormitorio principal también dispone de acceso a la terraza exterior. Dicha habitación se protege del sol mediante persianas que permiten decidir el nivel de asoleamiento según la época del año. Junto a la habitación principal se consigue situar el dormitorio de las niñas. Por otro lado, separada de las estancias principales de la vivienda y con cierta independencia se ubica una habitación polivalente que permite el uso de cuarto de juegos, sala de estudio o dormitorio para invitados, que se había solicitado.
Pequeños gestos proporcionan una lectura armónica a la fachada de la terraza exterior, la cual está marcada por los juegos de sombras, entradas y salidas, llenos y vacíos, combinaciones de volúmenes y una cristalera en esquina como protagonista.